El único que no puede faltar en ninguna charola de quesos es el queso Brie. Con galletas y pan, con mermeladas, o de bocado en bocado es simplemente una delicia.

 

Pero, ¿conoces de qué está hecho y dónde se elabora?

 

Este queso pariente del Camembert es proveniente de la región de Brie en Francia, por eso su nombre, pero hoy en día es elaborado por varias regiones en el mundo.

Es elaborado con leche cruda de vaca, y tiene una suave capa comestible formada por el moho del mismo queso que aparece durante el periodo de curación.

 

El queso Brie se crea añadiendo cuajo natural a la leche templada, y una vez cuajada se pasa a moldes circulares donde se escurre por 18 horas aproximadamente. Después se sala el queso y se riega con hongos Penicillium, que son los que forman la corteza del mismo una vez que madure.

Conforme va madurando, el queso adquiere un fuerte sabor y olor a amoniaco y la suave capa se empieza a endurecer.

 

Las diferentes variedades de queso Brie se debe a su maduración, pero generalmente la pasta toma una textura cremosa, con un color blanco o amarillo claro; un olor a leche cruda o nata y es mucho más suave que la corteza.

 

Acompaña el queso Brie que te traemos en Grupo Novelda con pan y con un vino genérico de buen cuerpo como el Cabernet, Malbec y Shiraz.